Hoy caminaba con mis hijos en dirección al colegio. Y el mayor, de siete años iba corriendo por la calle. Cuando estábamos a una distancia de unos 20 metros, en un momento de este recorrido se tropieza y se cae.

Yo me doy cuenta de esto cuando él ya está en el suelo. Desde la distancia, mientras empiezo a correr le pregunto en alto “¿te has hecho daño?”

El hombre que tengo a mi lado, de unos 60 años, me comenta en alto. “no le ha pasado nada“.

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Los juguetes sexuales pueden tener un papel importante para enriquecer la vida sexual de una persona o de una pareja. Una función relevante de los juguetes sexuales es el conocimiento del propio cuerpo, y de las zonas que más te gusta que sean estimuladas y la forma cómo hacerlo (que esto puede ayudar a el compartirlo cuando se está con otra persona). Nos facilita conocer el cuerpo y las preferencias del otro/a. Ayuda a ampliar el repertorio de juegos a realizar , puede ser un activador del deseo sexual y también es una variable que motiva a tener con mayor frecuencia más actividad sexual. Otra variable favorecedora de utilizar los sextoys es que abren oportunidades a jugar con mayores zonas del cuerpo y no sólo la penetración.

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